Guerra en Ucrania: la navegación en el centro de las sanciones de la UE contra Rusia

Puerto ruso de Sochi

La Unión Europea ha revelado sus nuevas medidas de sanción contra Rusia en el marco del conflicto ucraniano. La industria náutica se ve ahora afectada, mucho más allá de los superyates.

Prohibición de la venta de embarcaciones de recreo en Rusia

Como parte de su cuarto paquete de sanciones contra Rusia desde el inicio de la guerra en Ucrania, la Unión Europea ha ampliado la gama de productos afectados por las prohibiciones de exportación. En la lista de bienes de lujo que las empresas europeas ya no pueden vender a los rusos figuran las embarcaciones de recreo, junto a los coches y aviones de alta gama. A partir del 15 de marzo de 2022, todas las embarcaciones de motor, de vela y otras embarcaciones de recreo cuyo valor supere los 50.000 euros no podrán salir de la UE con destino al mercado ruso.

La acción se decidió de forma coordinada y también debe ser aplicada por los Estados Unidos.

Otras consecuencias para el sector náutico europeo

Desde el comienzo del conflicto, fueron las incautaciones de los superyates de los multimillonarios rusos las que ocuparon los titulares. Las consecuencias económicas del conflicto para el sector náutico europeo afectan sobre todo a los grandes yates, además de los efectos evidentemente dramáticos para la producción local ucraniana, que tiene un peso importante y desconocido en determinados nichos con marcas como Brig o Grand.

Con el nuevo paquete de sanciones, todos los astilleros europeos se ven afectados. Aunque Rusia no es un mercado clave para el sector náutico mundial, la industria náutica ha experimentado un desarrollo sustancial de su actividad allí. Los grandes proyectos de puertos deportivos en el Mar Negro estaban sobre la mesa. Es probable que el conflicto ponga en cuestión esta dinámica durante mucho tiempo.

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