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El ejercicio 2024-25 del Grupo Catana estará marcado por un periodo de regulación del mercado náutico, tras varios años de crecimiento sostenido. Los estados financieros consolidados para el ejercicio cerrado a 8 de diciembre de 2025 muestran una importante desaceleración de la actividad, acompañada de elecciones industriales conscientes.
Las ventas bajan en un mercado a la expectativa
Las ventas consolidadas ascendieron a 174,9 millones de euros, un 23% menos que en 2023-2024 (229,5 millones de euros). Esto refleja un mercado en declive desde 2023, marcado por el fin de la hiperinflación y la actitud expectante de los clientes ante el contexto geopolítico y económico internacional.
El Grupo afirma haber aplazado los efectos de la caída del mercado gestionando cuidadosamente su cartera de pedidos durante los años de fuerte demanda. A principios de año también se aplicó una reducción selectiva de los precios de venta para mantener el impulso de las ventas.
Ajustar los volúmenes y mantener la capacidad industrial
Ante la caída de la actividad, el Grupo Catana ha reducido sus ritmos de producción para ajustarse a la demanda real del mercado final. Esta adaptación se basa en las palancas de flexibilidad acumuladas en anteriores fases de crecimiento.
No obstante, el Grupo ha optado por mantener una plantilla superior a las necesidades inmediatas. Esta decisión se ha traducido en una infraproductividad deliberada, con el objetivo de preservar la capacidad del Grupo para aumentar su escala en caso de una rápida recuperación del mercado. Los gastos totales de personal disminuyeron un 10%, hasta 30,3 millones de euros, un descenso limitado dada la caída de las ventas.
Rentabilidad a la baja, pero positiva
El margen bruto ascendió a 92 millones de euros, frente a 130 millones en 2023 2024. Representó el 52,5% de las ventas, cifra inferior a la del ejercicio anterior, debido en particular al impacto de la política de precios aplicada y a las renegociaciones pendientes con los proveedores.
El resultado de explotación asciende a 17,4 millones de euros, frente a 37,4 millones un año antes, lo que representa alrededor del 10% de las ventas. Incluye una pérdida de lanzamiento de 3 millones de euros relativa a la puesta en marcha del proyecto industrial y comercial de la marca YOT en Portugal.
El beneficio neto atribuible a los accionistas de la matriz ascendió a 13,6 millones de euros, frente a los 29,7 millones de 2023-2024.
Una estructura financiera sólida a pesar de las inversiones
El flujo de tesorería de las operaciones se mantuvo positivo en 18,7 millones de euros. Los gastos de capital del ejercicio ascendieron a 21,2 millones de euros, incluidos el desarrollo de nuevos productos y la finalización de la planta de Aveiro (Portugal), dedicada a la división de lanchas motoras del Grupo.
La tesorería del Grupo es positiva, con 38,7 millones de euros. Los fondos propios del Grupo superan ya los 100 millones de euros, con 100,8 millones de euros, sobre un balance total de 226 millones de euros.
