Un laboratorio ecológico de superyates de la marina mercante

Un barco mercante de vela inspirado en el súper yate Black Pearl

El propietario del superyate Black Pearl quiere utilizar la experiencia de su yate de 107 metros para desarrollar barcos mercantes respetuosos con el medio ambiente. Un trampolín para la tecnología de los yates.

Una flota de 15 barcos de vela mercante

El propietario del lujoso velero Black Pearl, un magnate ruso, quiere aplicar la destreza tecnológica de su barco a los buques comerciales. Ha anunciado el lanzamiento de un proyecto para construir una flota de unos 15 barcos mercantes a vela. Las primeras unidades previstas serían los buques de carga rodada (ro-ro), que transportarían automóviles, con el fin de dar una respuesta ambiental al transporte transoceánico de automóviles.

Una aplicación de los conocimientos técnicos de la navegación

El proyecto del multimillonario ruso podría permitir que los conocimientos adquiridos en el mundo de los superyates durante la construcción de su superyate se trasladen al sector de la Marina Mercante. Construido por el astillero holandés Oceanco, el superyate tiene 107 metros de largo y 15 metros de ancho. Está equipado con 3 mástiles que soportan 2900 m² de superficie vélica con el aparejo DynaRig, hecho famoso por el velero Maltese Falcon. Esta tecnología de mástiles autoportantes y velas enrollables cuadradas permite el uso de grandes superficies de lona con una tripulación reducida, limitando al mismo tiempo la superficie de la cubierta, una ventaja tanto para los yates de recreo como para los profesionales.
También invitada durante la presentación del proyecto, la empresa Solar Cloth System debería participar en la aventura integrando sus paneles solares flexibles a bordo de los barcos.
Esos proyectos ofrecen buenas perspectivas de diversificación a las empresas de navegación de recreo que participan en la transición ecológica.

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